Defensa siciliana
El estoniano Paul Keres fue, ciertamente, el mejor jugador entre los que no llegaron a ser campeones del mundo. Se le llamó el campeón sin corona. Influido por una intensa práctica del juego por correspondencia, buscaba las complicaciones en cuanto era posible.
A los veintidós años ganó el importante torneo del AVRO, ex aequo con Fine, delante de Alekhine, Flohr, Botvinnik, Reshevsky, Capablanca y Euwe.
En la partida que sigue, Keres elige el enroque largo para explotar las debilidades negras en el ala de rey. El desarrollo del ataque que empieza con 18. g4!! merece echar un vistazo. La victoria sólo se puede obtener jugando Ae2, y eso es lo que explica el avance de los peones del ala de dama preparando el golpe de gracia g6.