Franciscus Antonius Kuijpers - Alexander Jongsma
Amsterdam (Países Bajos), 1968
Juegan las blancas
Un corolario al repentino cierre de líneas es la apertura instantánea de otras. El ojo y la mente humanos pueden acostumbrarse a que ciertas diagonales y columnas se cierren, tanto como a que se abran. Y este hecho conlleva sorpresas en situaciones como la siguiente:
Las blancas perdieron en dos jugadas. ¿Cómo es posible?
La posición parece un típico medio juego de una Defensa Siciliana, en el que las blancas toman la iniciativa gracias a un conocido sacrificio: colocan uno de sus caballos en ‘b5’, y después de ser capturado toman con el otro caballo, a lo cual sigue, tras la retirada de la dama negra, Cxd6 o Dxd6. Materialmente sólo obtienen dos peones a cambio de la pieza, pero la experiencia ha demostrado que es muy difícil que las negras logren liberarse. ¿Qué problema conlleva esto?